La cantidad de grasa que quema nuestro cuerpo depende en gran medida del funcionamiento de nuestro metabolismo. Si hay problemas con el metabolismo, perder peso no será fácil. Aun así, hay algunos trucos que pueden ayudarte a conseguir la pérdida de peso. Nuestro cuerpo está programado para obtener energía quemando grasas, proteínas o hidratos de carbono. El cuerpo utilizará cualquiera de ellos que esté disponible para obtener su energía. Si empiezas el día con muesli, pan y copos de maíz tu cuerpo se centrará en obtener su energía de los hidratos de carbono. Esto eleva los niveles de insulina en la sangre y puede contrarrestar los esfuerzos de pérdida de peso. Por lo tanto, tenemos que convertir nuestro cuerpo en una máquina de quemar grasas a primera hora de la mañana, y sí, esto requiere una buena ración de grasas. Lee los cinco puntos siguientes para saber cómo funciona exactamente.
La quema de grasa es precisamente eso, la quema de grasa. Esto significa que hay que entrenar al cuerpo para que adquiera su energía a través de la quema de grasas, y esto puede lograrse con unos sencillos trucos, especialmente cuando se ponen en práctica al principio del día. El desayuno es, sin duda, la comida que marca el ritmo de la quema de grasas para el resto del día.
Aunque no parezca un consejo dietético convencional, en realidad es bastante lógico. Si aportas grasas a tu cuerpo por la mañana, éste te recompensa con una mayor capacidad de quemar grasas. Consumir grasas saludables a la hora del desayuno significa que el cuerpo puede recurrir automáticamente a estas grasas a lo largo del día para obtener energía. Para que esto sea efec- sin embargo, tendrás que eliminar los hidratos de carbono y los azúcares de tu comida matutina.
Un aguacate está cargado de grasa, pero es una grasa saludable. Si comes un aguacate por la mañana, proporcionarás a tu cuerpo la energía suficiente para el día. Además, los aguacates hacen que te sientas lleno durante más tiempo y reducen las punzadas de hambre.
“Los frutos secos están llenos de grasa. Engordan, igual que las patatas fritas” Por supuesto que todos hemos oído esto sobre los frutos secos, pero no es del todo correcto. Sí, los frutos secos tienen un alto contenido en grasa, por lo que las raciones de nueces, almendras y otros frutos secos deben ser pequeñas. Sin embargo, un puñado de frutos secos puede tener un gran valor nutricional.
Nuestros favoritos: las almendras (quemagrasas muy eficaces), los anacardos (contienen muchos carbohidratos y magnesio) y las nueces, consideradas un verdadero “alimento para el cerebro”. Este fruto seco tiene un aspecto que hace honor a su nombre.
El coco es bien conocido por la multitud de beneficios que aporta a la salud. Con su equilibrada proporción de proteínas, además de nutrientes y minerales, el coco es un todoterreno. El aceite de coco contiene propiedades antibacterianas y ayuda a protegernos de las influencias externas. Además, como es un ácido graso de cadena media, el cuerpo lo convierte rápidamente en energía. Este proceso de conversión gasta calorías, con lo que aumenta tu ritmo metabólico. Es fácil incluir el coco en tu comida matutina: prueba a freír tus huevos en aceite de coco o a espolvorear copos de coco sobre tu aguacate.
Puedes acelerar el modo de quemar grasa de tu cuerpo por la mañana muy fácilmente. Una forma estupenda de empezar el día es combinar los cuatro alimentos mencionados anteriormente en una comida.
Consejo: tómate tu tiempo para desayunar. Desde luego, no es la comida que debes engullir en el tren o mientras conduces hacia el trabajo.